¿Hay algún plan mejor que hacerse más de 300km para disfrutar en directo de dos de las mejores bandas del metal estatal? Algo así debió pensar nuestro DavidDR el pasado viernes cuando se plantó en la sala 16 Toneladas de Valencia para deleitarse con la tremenda noche de metal que allí ofrecieron Daeria y Opera Magna.

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Valencia allá fuimos. Y es que, por primera vez, salía de mi zona de confort madrileña para explorar nuevas salas. A los grupos ya los conocía, así que jugaba sobre seguro.
Casualidades de la vida, o aciertos en el trabajo de programación por parte de On Fire, el fin de semana del 22, 23 y 24 de marzo aunaba dos grandes conciertos de metal nacional y tres grandes grupos: Opera Magna y Daeria por un lado y el mítico Leo Jiménez con sus Leos por otro. Pero dejemos a La Bestia para más adelante.

A las 21:00 abría con puntualidad la sala 16 Toneladas para descubrir una de las salas mejor ambientadas de cuantas he estado. Las luces de discoteca se proyectaban por todo el suelo entre sonidos de metal. El escenario estaba preparado para que a las 21:35 salieran a escena Daeria. La banda venía a presentar su tercer trabajo "Morfeo", y aunque he seguido su trayectoria desde el principio, aún no los había visto en directo.

El concierto abría con una intro y con "El Alquimista". La sala aún no presentaba una gran entrada y al grupo le costó enganchar al público. La voz de Ángel no se escuchaba con claridad y los solos de guitarra de Carlos, que acababa de llegar de EEUU, demasiado bajos desde esas primeras filas en las que me encontraba. Aunque estos problemas fueron superándose poco a poco, nunca se terminó de escuchar con claridad la voz.

Temas de sus tres trabajos, como "Vive", la gran "El Ojo de Aughra", "Siete Mares" o "Laberinto" en homenaje a David Bowie no pudieron faltar en su repertorio. Y un público muy entregado, además de bastante joven si lo comparamos con el habitual en Madrid.
Para esta ocasión contaron con la presencia al bajo de Tony que se subía para echarles una mano, mostrando una gran compenetración con la banda.
Entre sus temas, tampoco pudo faltar su homenaje a Tim Burton con "Último Aliento", para terminar, tras una hora de concierto, con "Reina de Corazones" y ese mágico "que le corten la cabeza" cantado por toda la sala. Pero muy mágico.

La sala comenzaba a presentar muy buena entrada para recibir a Opera Magna y aquí haré un parón de esos para crear expectación o para reivindicar a la banda valenciana. Y es que estamos ante una banda única en España. Y lo digo después de haberlo comentado con mis compañeros de web y coincidir. Nadie en este país hace actualmente el power metal que hace Opera Magna, donde lo musical y la poesía se mezclan con una interpretación perfecta de uno de los mejores (y más infravalorados) vocalistas: José Broseta.

Dicho esto, el concierto se esperaba grande, pero no gigante. Opera Magna cuenta con cuatro discos en el mercado y su "Heroica" publicado este mismo mes. Venían de girar con Angra y Arwen, además de con muchos problemas de sonido, según pudimos comprobar en sus conciertos de Madrid y Gijón. Y venían a triunfar en su casa, a resarcirse y darnos un concierto completo. Y vaya, vaya.
Después de la pertinente intro el grupo se jugaba todo con la propia "Heroica" y lo digo así, porque es uno de los mejores temas del álbum, a quien siguieron "Para Siempre", "Corazón delator" y el primer single que lanzaron de su último disco, "La Muerte de un Poeta".

Tanto con Opera Magna como con Daeria y otro centenar de bandas, creo que les falta una puesta en escena que apoye su música para crear más ambiente. Es una asignatura pendiente en el metal español.
No obstante, el concierto seguía repasando sus cuatro trabajos con "Entierro Prematuro", pidiendo a Javier Nula que tocara más rápido, "Volver" o "Donde Latía un Corazón" de su trilogía "Del Amor y Otros Demonios".

Algo a tener en cuenta es que para esta ocasión contaban con la labor de Adrián Perales batería de Bloodhunter, y es que la banda no tiene un batería fijo después de la salida de Adrián Romero, y quien a pesar de las diferencias de estilos de ambas bandas cumplió a la perfección, aunque ya lo pudimos comprobar en el disco ya que él mismo se encarga de la grabación de las baterías.
Coninuó la noche con temas como "Tierras de Tormento", "Después de ti", "Hijos de la Tempestad" e "Historia", una de las canciones más folk de la banda y una de las que mejor funciona en su último trabajo.

El concierto llegaba a su parte final con un repaso a su historia musical (y con excesivo calor en la sala) con "Por Un Corazón de Piedra", "El Pozo y el Péndulo" de su homenaje a Poe, "Horizontes de Gloria" y terminaba a las 00:30 con "La Herida" y yo al final de la sala porque por delante el ambiente se había puesto demasiado loco.

Si ya me gustan las noches de los viernes, más me gustan con conciertos de semejante calibre. 16 Toneladas y la noche valenciana vibraron al son de dos bandazas que habían conseguido que moviera mi culo, cogiera un tren y me desplazara unos cientos de kilómetros hacia el levante. Lo mejor es que aún quedaba la segunda parte de mi fin de semana.

Dales una oportunidad y si no te convencen, dales otra.

Crónica y fotos: David DR