Dentro de la masiva oferta de festivales del fin de semana pasado una de nuestras elecciones fue el Z! Live Rock Fest de Zamora al que acudió FelipeSM, quien hoy nos presenta la crónica de la primera jornada con bandas como Saratoga, Sin Control, Ciconia, Revolution Within y Nocturnia.

¡No te pierdas la crónica y fotos de la noche!

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Segundo año del Z! Live Rock Fest de Zamora y obviamente nosotros no nos lo quisimos perder, así que tras un par de horas de viaje, un susto en el hotel cortesía de Booking y solucionado gracias a la amabilidad de la gente de Zamora y la suerte, me encaminé a la plaza de la catedral donde tendría lugar la primera jornada del festival o “warm up party”.

Así pues, cuando llegué a la plaza de la catedral ya estaba Nocturnia descargando su arsenal con rigurosa puntualidad. En torno al centenar de personas asistían a este primer concierto con el sol cegador aún detrás del escenario, aunque según pasaban los temas iba llegando gente a las gradas y la barra. Sobre las tablas estaba una banda que en unos cuarenta minutos de actuación demostró su buen hacer y sus ganas de recuperar el tiempo “perdido” tras “Sin Retorno”. El sexteto presentó su último trabajo “Tierra de Cobardes” en un buen concierto que puso alto el listón para el resto de bandas. Capitaneados por un fenomenal Alberto Symon y con un toque de teclados que hace subir al grupo de nivel en directo, los de Toledo supieron animar al público asistente gracias a temas como “Alza los Puños”, “Tierra de Cobardes” o “En Busca del Tiempo”.
Gran sabor de boca el dejado por Nocturnia, con conciertos así no creo que tarden en ocupar posiciones más cercanas a los cabezas de cartel en festivales como este Z! Live.

Mientras esperábamos para Ciconia seguía llegando gente al estupendo recinto de la catedral, qué gran lugar para hacer un festival gratuito. Y es que la plaza tenía de todo, una barra con buenos precios, gradas para el público y baños con luz incluida, tan solo faltaba alguna papelera, algo de comida y que el personal se cortase con el botellón, aunque esto último ya es una batalla perdida.

Sobre las nueve de la noche arrancaba Ciconia. Y os voy a ser sincero, lo de esta banda no es normal, allí se plantó el trío sin vocalista (ya que no tiene) y se marcó un concierto de altura. Sonido perfecto y una banda técnicamente impecable, el resultado estaba claro. Para mi gusto tener un apoyo vocal remataría sus temas, aunque fueran unos guturales de vez en cuando o una leve dosis melódica, ya que conectaría más su música con el público.
Posiblemente el lugar de Ciconia estuviera a cientos de kilómetros en otro festival, con nombres como Anathema o Devin Towsend, pero mientrasmientras los eventos del género seenteran y no, disfrutamos los amantes de la variedad. Si lo vuestro es el rock progresivo, Ciconia es un “must” en toda regla.

Con ya alrededor de tres centenares de personas en el público llegaba el turno de Sin Control, banda local de thrash metal. Con un estilo a caballo entre el thrash/groove y la fuerza y lírica de bandas como Hamlet o Koma, el cuarteto presentó su segundo ep “Tiempos Duros”, con temas como el homónimo del trabajo o “Ningún Dios”. Además, también nos regaló una estupenda versión de “Las Flores del Mal”. Buena representación del metal zamorano, que dejó al público listo para lo que estaba por venir. Si el grupo es capaz de añadir una mayor variedad en las líneas vocales de sus temas y aportar más dinamismo en el escenario, se convertirá en un nombre a tener en cuenta en la escena thrasher nacional.

A estas alturas de la noche el frío castellano comenzaba a aparecer y hacer mella en el medio millar de personas que allí se congregaba, pero todo dejó de importar cuando Revolution Within salió a escena. La banda portuguesa confirmó en cincuenta minutos algo que ya sabíamos, en Portugal se hace muy buen metal. Buena muestra de ello fueron los circle pits e incluso un tremendo wall of death que la banda fue capaz de arrancar solo con la ayuda de la potencia de su thrash metal con aires death. Con su vocalista Raça hablando en castellano y llevándose al público al bolsillo, el grupo nos ofreció temas como “Silence”, “Without a Reason”, “Revenge Now”, “Pull the Trigger” o una estupenda versión de “Paranoid” para cerrar su show.
Quizás les faltó algo de dinamismo en escena, cosa que compensó Raça con su conexión con el público zamorano, personalmente me gustó especialmente su incisiva proclama “el metal no es violencia” antes del wall of death. Mucho ojo porque Revolution Within hizo más de un fan en Zamora y estoy seguro que no tardaremos en ver a la banda de nuevo por nuestro país.

El cierre de esta primera y fría noche corrió a cargo de Saratoga. Los de Niko del Hierro salieron a por todas como suele ser habitual pero se encontraron con un varios problemas de sonido que lastraron su actuación, primero en el micro de Tete en los primeros temas y más adelante con el sonido de la guitarra de Jero, a quien no se le terminó de ver cómodo durante el show. A pesar de ello, la banda tiró adelanté y según iban cayendo temas como “Tras la Rejas”, “Maldito Corazón” o “No Sufriré Jamás por Ti” la noche se iba animando, con Niko subido en el equipo de sonido, Jero luchando con los problemas de sonido, Dani a lo suyo demostrando su fama como batería y un Tete que aunque con frío volvió a lucirse una vez más.
Su recta final de concierto fue apoteósica, pues si algo tiene Saratoga son grandes temas y cuando en un concierto una banda encadena “Heavy Metal”, “A Morir”, “Si Amaneciera”, “Como el Viento” y “Perro Traido” solo te queda sonreír y aplaudir.
El estado de forma de la banda es soberbio y en unos meses comienza su gira “25 aniversario”… yo no puedo esperar.

Gran noche esta “warm up party” del Z! Live Rock Fest, que aunque no tuviera nada de “warm up” por el frío que nos invadió, nos dejó un gran sabor de boca y listos para lo que estaba por venir. Solo por esta velada ya hubiera merecido la pena el viaje a Zamora.
Lamentablemente no todo son parabienes para la noche, ya que al ser una jornada gratuita, favoreció la presencia de una minoría de público que aún no gustándole alguna banda allí estuvo para criticar e insultar durante sus conciertos. Penosa actitud que difícil solución tiene, quizás todas las bandas deberían tomar el mensaje de Raça de Within Revolution y promulgar a los cuatro que el metal no es violencia pero sí es respeto.

Crónica y fotos: FelipeSM – www.smfelipe.es

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