Continuamos con la crónica del Hellfest, uno de los festivales más prestigiosos de Europa, que tiene lugar en la pequeña localidad francesa de Clisson. Aquí os dejamos la crónica de la segunda jornada.

¿A qué esperáis?

Nos desayunamos en la segunda jordana del festival con la triste noticia del fallecimiento de Vinnie Paul, batería de Pantera y Hellyeah, algunas bandas le rendirían homenaje sobre el escenario, en una jornada llena de eclecticismo y variedad de estilos, con sonidos dispares cercanos al punk, al hip hop o al metalcore .

Para abrir boca nos acercamos a ver la actuación de Savage Messiah, que comienza puntual a las 12:15h. Hay que decir que la puntualidad con la que se suceden las actuaciones y el buen sonido del que gozan las bandas, es la tónica general en el Hellfesf, dos factores que no se alteran y que ayudan a la hora de disfrutar un gran festival como este. Buen concierto el de los británicos a pesar del horario y de lo reducido del tiempo demostraron ser una gran banda de metal, consiguieron poner a botar a buena parte del público del Hellfest con temas como “Blood Red Road”,“Scavengers of Mercy” o “Hands of Fate”.

A continuación, nos acercamos a la actuación de los alemanes Eskimo Callboy, que no lograron engancharnos con su mezcla de metalcore y electrónica. Demasiado sampler y artificio, aunque ambos cantantes pusieron toda la carne en el asador, sólo brillaría algún tema como “Shallows” y poco más.

Llega el turno de las roqueras estadounidenses L7, tras un parón de una década las angelinas destilaron actitud punkarra sobre el escenario, con la cantante y guitarra Donita Sparks al frente de la banda. Cuarenta minutos de actuación, en la que sonaron temas directos y emblemáticos de la banda como “Fuel my fire”, “Pretend We´re dead” o “Shitlist”.

Después de darnos un pequeño respiro y un rato de sombra, volvemos a la carga para presenciar la actuación de Jonathan Davis, el vocalista y compositor de Korn presentaba en el Hellfest su primer trabajo en solitario “Black Labyrinth”, si bien hay que destacar la calidad de la banda, en la que se incluía un contrabajo y un violín, no acabó de conectar con el público. Quizás un festival como el Hellfest no sea el marco más adecuado para los nuevos temas de Jonathan Davis, como “Underneath my skin” con el que comenzaba su actuación, “Finall days” o “Basic needs”.

Cambiamos de tercio y nos acercamos hasta el escenario Altar para presenciar la actuación de los death metaleros británicos Memoriam, la banda formada en 2016, tras el fallecimiento del batería de Bolt Thrower Martin "Kiddie" Kearns, está integrada por Karl Willets (Bolt Thrower) voz, Frank Healy (Benediction, Cerebral Fix) al bajo, Scott Fairfax (Cerebral Fix) a la guitarra y Andy Whale (Bolt Thrower) a la batería. Arrancaron en el Hellfst con “War Rages On” de su último trabajo “The silent vigil” del que tocaron varios temas, pero sin olvidarse de su anterior trabajo “For the fallen”, del que destacaron por su buena acogida “Resistance” y “Flatline”. Un chute de death metal de la vieja escuela que agradeció el público que se acercó hasta el Altar.

Nos desplazamos ahora hasta el Temple para ver la actuación de los rusos Arkona y ver in situ su particular puesta en escena al más puro estilo vikingo. Masha “Scream” a la voz, Sergej “Lazar” a la guitarra, Ruslan “Kniaz” al bajo, Andrey Ishchenko a la batería y Vladimir Cherepovsky flauta, gaita. La banda destacó por su entrega sobre el escenario y por la utilización de instrumentos de viento como la gaita o las flautas. Comenzaron su actuación con “Mantra” con la vocalista Masha acaparando todo el protagonismo y cambiando de registros vocales según lo requerían los temas, entre los que más conectaron con el público destacaríamos “Goi, Rode, ¡Goi!” ,“Stenka na Stenku” y “Yarilo” con la que finalizaron la masterclass de folk metal pagano.

Y llegaba el momento de lo que era para muchos uno de los platos fuertes de esta segunda jornada, la actuación de los galeses Bullet for my Valentine. Una hora en el escenario principal que hicieron las delicias de los numerosos seguidores de la banda, no obstante, el grupo ha vendido más de tres millones de álbumes en todo el mundo. Comenzaron con “Don’t Need You” y “Over It”, metiéndose rápidamente al público en el bolsillo gracias al buen trabajo de Matt y Michael, no faltó tampoco el solo de batería por parte de Jason Bowld, para que sonara a continuación “Scream Aim Fire” y “Piece of me”. En la recta final la celebradísima “Tears Don’t Fall” y “Waking the Demon” echaron el cierre dejando satisfechos a sus seguidores.

Nos desplazamos ahora hasta el escenario Temple para acudir a la cita con la banda de death metal noruega Enslaved. Con un sonido atronador y sin dar concesiones comenzaban con “Roots of the mountain”, la banda con Ivar Bjørnson y Grutle Kjellson al frente dieron un repaso a su discografía, la cual ha ido evolucionando disco a disco, hasta llegar a su último trabajo ‘E’ de 20017. Sonaron temas como “Storm Son”, “Ruun” o el clásico “All fǫðr Oðinn” muy bien recibido por el público que agradeció la actitud y la entrega de los noruegos.

Llegaba ahora el turno del cabeza de cartel de la jornada, los americanos Avenged Sevenfold en el Main Stage 1, pero antes guardaríamos un minuto de silencio en memoria de Vinnie Paul batería de Pantera. Después de que sonara el “Walk” de Pantera, comenzaba la actuación de Avenged Sevenfold con “The Stage” y “Hail to the King”. La banda estuvo muy activa sobre el escenario, con una dinámica puesta en escena que les ayudó a conectar con el público y recibir su feedback.. Avenged Sevenfold ofrecieron un buen repaso a su discografía, destacando temas como “Buried alive” la lenta “So far away”, “Nightmare” y “Bat Country” con la que se despidieron hasta la llegada de los bises. Después de lo visto sobre el escenario del Hellfest podría decirse que se trata de una banda sobrevalorada, aunque las cifras están ahí y el haber vendido más de ocho millones de discos en todo el mundo da una idea del estatus de la banda, la verdad es que en esta jornada del Hellfest encajaron perfectamente en el cartel. Ya en la despedida sonaron “Shepherd of Fire” y “Unholy Confessions” dejando a sus incondicionales más que satisfechos.

Y para cerrar esta segunda jornada de festival nos desplazamos de nuevo al Temple, para recibir otra ración de black metal melódico de la mano de los maestros noruegos Dimmu Borgir. Los noruegos se presentaron con una infernal puesta en escena llena de fuego, luces rojas, humo y cruces, comenzando con “The Unveiling” e “Interdimensional summit” de su último trabajo Eonian, aunque pronto pasarían a ofrecernos material más clásico como “Dimmu Borgir” o “Gateways”de su álbum “Abrahadabra” excelentemente recibidas por el público del Temple, que a esas horas aún lograba mantenerse en pie. A las dos de la madrugada finalizaban puntualmente todos los conciertos en los distintos escenarios, Dimmu Borgir hacían lo propio con “Progenies of the Great Apocalypse” y “Mourning Palace”.
Una ráfaga de fuegos artificiales iluminaba el cielo de Clisson dando por finalizada este segundo día de festival, ya sólo quedaba retirarse y descansar todo lo posible para afrontar la intensa jornada del domingo.

Crónica y fotos: NachoGS