Nuestro "Disco de la Semana" nos lleva hoy a Suecia para presentaros uno de los trabajos clave de 2016, "Atoma" de Dark Tranquillity.

¿A qué esperas?

 

 

Los maestros del sonido Gotemburgo vuelven con “Atoma”, su undécimo disco, tres años después de editar “Construct” y aparentemente con la misma calma e ingredientes que siempre los han caracterizado, a pesar de que hayan cambiado muchas cosas.

Y es que para una banda tan estable en todo como ha sido siempre Dark Tranquillity, la última década ha sido un absoluto desafío, con cambios de formación, músicos de sesión, giras con instrumentos sampleados e incluso alguna cancelación de gira europea por falta de seriedad de algún promotor.

Todo este calvario comenzó en 2008 con la marcha de Michael Nicklasson, su bajista durante diez años, que suplieron con Daniel Antonsson, que a su vez los abandonó en 2013, obligando a girar con el bajo pregrabado desde entonces hasta que este año Anders Iwers se ha establecido como bajista oficial de la banda. A su vez, Martin Henriksson dejaba también la banda este año, sin tener hasta el momento sustituto fijo a la guitarra, y Niklas Sundin se toma un descanso de las giras, con un sustituto para el actual tour por Estados Unidos. Dark Tranquillity se encuentran ahora mismo girando con dos guitarristas de sesión. Casi insoportable para cualquier grupo.

Los suecos no obstante son un ejemplo de trabajo y regularidad como pocos se pueden encontrar en la escena. Después de “Fiction”, un disco absolutamente esencial en su discografía editado poco antes del comienzo de este baile de nombres, lanzaron “We are the void” y “Construct”, viéndose la calidad de su trabajo mermada sólo un ápice en el primero de ellos.

Ahora regresan con “Atoma” y sería de esperar que el nivel bajase de nuevo tras los sucesos de este año, pero no sólo no baja, si no que los de Gotemburgo han vuelto a su forma más pura. Si “We are the void” sonaba demasiado a una versión menos inspirada de “Fiction” y “Construct” a una segunda parte de “Projector”, “Atoma” suena a Dark Tranquillity. Todas las etapas del grupo se ven reflejadas en este nuevo disco. Los fans de los años 90 abrazarán la crudeza renovada que muestra el disco, así como unas armonías más arriesgadas en sus formas que habían dejado un poco de lado en busca de fórmulas más comunes del género. Los fans de los 2000 apreciarán el componente más veloz con respecto a “Construct”, con unos riff más propios en ocasiones del Thrash que recuerdan a la etapa de “Damage done” y “Character”, y los fans de sus trabajos de esta década se agarrarán a la oscuridad y profundidad de temas como “Faithless by default”. “Atoma” suena a Dark Tranquillity en toda su expresión.

Sin duda, al grupo le ha venido bien contar con un bajista oficial en sus filas para afrontar la grabación, dando como resultado unos graves mucho más realzados y firmes que en “Construct”. No es sólo que el bajo haya aumentado en presencia, es que su compenetración con la batería de Jivarp y los teclados de Brändström parece total. Mientras, Niklas Sundin, el otro cerebro musical de Dark Tranquillity, ha soltado en “Atoma” todo lo que en “Construct” parecía reprimido, recobrando un protagonismo que había cedido en beneficio de las atmósferas. Mikael Stanne, por su parte, suena mejor que nunca, con unos limpios cada vez más trabajados que, sin embargo, en este disco sólo utiliza en temas puntuales y una voz rasgada extremadamente personal y carismática.

De los temas en concreto podrían destacarse infinidad de detalles. El inicio basado en la escala armónica de “Encircled” que desemboca en un riff propio del “The gallery” es soberbio y crea uno de los mejores temas de Death melódico puro que Dark Tranquillity han hecho en años. En “Atoma” aparece por primera vez la voz melódica de Stanne dándole cierto aire gótico que continúa en “Forward momentum”. Mientras que en “Neutrality” la palma se la lleva el trabajo de guitarras, con un pre estribillo que pone los pelos de punta. Podría seguir alabando la agresividad de “Force of hand”, el tremendo estribillo de “Faithless by default” o las letras de Mikael, desgarradoras una vez más, pero lo mejor llevados a este punto es ponerse “Atoma” de principio a fin y dejarse llevar. El disco se pasa en un suspiro.

Como curiosidad, en la edición especial incluyen dos temas más, “The absolute” y “Time out of place”, que muestran el lado más ambiental de la banda. Ese que queda sepultado entre sus temas comunes. Probablemente nunca incluirán este tipo de sonidos como parte principal de sus discos, pero se agradece descubrir de este modo otras inquietudes musicales de sus miembros.

Me descubro ante Dark Tranquillity. La capacidad que muestran de sobreponerse a la pérdida de miembros clave es asombrosa. Sus dos últimos discos, aunque convencieron a los fans, dejaron dudas en oyentes casuales y crítica; algo que no parece que vaya a pasar con “Atoma”. Candidato a disco del año.

 

Tracklist:

01.Encircled
02. Atoma
03. Forward Momentum
04. Neutrality
05. Force Of Hand
06. Faithless By Default
07. The Pitiless
08. Our Proof Of Life
09. Clearing Skies
10. When The World Screams
11. Merciless Fate
12. Caves And Embers

 

Dark Tranquillity son:

Mikael Stanne – Voz
Martin Brändström – Teclados
Niklas Sundin - Guitarra
Anders Iwers – Bajo
Anders Jivarp – Batería

 

Nota: 9.5/10

Review realizada por JairoDC