A principios de año veía la luz "Unity", tercer disco de Against Myself. Un estupendo trabajo de metal sinfónico, que tras los cambios de formación de la banda JuanF nos presenta a continuación.

¿A qué esperáis para descubrirlo?

 

La realidad no se puede parar y a veces complica el modus operandi de ciertos quehaceres. Me toca hacer la crítica de “Unity”, disco de la banda de metal sinfónico Against Myself una vez pasado y reposado todo el problema de cambio de vocalista. Irene Villegas, hasta el momento vocalista de la banda y persona encargada de grabar las voces en este disco confirmaba su salida del grupo afincado en Ciudad Real. Tras meses de silencios y rumores, se confirmaba a la cantante de In.Verno y Unliving Sin, Elizabeth Amoedo, como nueva integrante de plenos derechos.

Con este contexto, y ya reposado suficiente el tema, me predispongo a analizar el trabajo que dejó grabado la antigua formación, haciendo caso omiso a otra cosa que no sea el contenido del mismo. “Unity” es una montaña rusa vertiginosa, es la puerta a entrar a otro mundo lleno de sonidos y colores. La ambientación coge fuerza en unas melodías llena de capas y matices. Todo está cuidado y mimado, ocupado su sitio específico dentro de la canción. Seguro que hay sonidos que incluso no captamos a primera ni a segunda escucha.

Es increíble el crecimiento que pegó, de un día para otro, el metal sinfónico, llegando a posicionarse muy alto en todos los festivales metaleros con nombres de la talla de Nightwish, Within Temptation o Epica, y en un segundo grado con potentes formaciones como las de Delain o Xandria. Pasó de ser un subgénero marginal del que muchos rehusaban a ser el estandarte venerado y apoyado de la actualidad. Yo, personalmente, no soy un entendido del género ni mucho menos, pero festivales como el Leyendas del Rock me enseñaron esta forma de crear portales melódicos hacia lugares remotos y fantásticos, donde prima la sorpresa por encima de todo.

Against Myself han sabido plasmar a la perfección ese espíritu de “sorpresa” del que hablo, siendo capaces de incluirte detalles a la altura de coros gregorianos o instrumentos de viento cuando menos te lo esperas. “Hero’s Soul” y “The Wanderer” fueron las píldoras impulsadas por la banda como singles, con videoclips vistosos y muy trabajados que plasman la profesionalidad con la que se toman este trabajo los manchegos. Musicalmente, consiguen empastar a la perfección la batería atronadora de Charly Carretón en “Kill to Live” con la sencillez y delicadeza de Irene Villegas en “Crystal Tower”, un tema marcado por la fina desnudez vocal.

Pero tienen tiempo para el descontrol en “Over The Clouds”. Para mí, el tema más completo de todo el disco, que incluye una segunda parte del track escandalosa, aportando un virtuosismo sensacional y lleno de adrenalina. Como si de una montaña rusa se tratase, en “Unity” hay cabida para todo tipo de tempos, incluso con varios en una misma pista. Y esta es una de las grandes ventajas que tiene este género, sin contar el poder femenino que desprende con una mayoría arrolladora de frontwomans. Así pues, marco este disco como un imprescindible para aquellos que se quieran adentrar en el metal sinfónico, así como para los que ya están en el centro del apogeo. Savia española que revitaliza una escena estancada siempre en favor de los mismos.

 

Tracklist:

1- To The Unknown
2- Unity
3- Hero’s Soul
4- Over The Clouds
5- Demons
6- The Wanderer
7- Crystal Tower
9- Kill to Live
10- Oniros

 

Against Myself son:

Elizabeth Amoedo – Voz
Charly Carretón – Batería
Carlos Alcalde – Teclados
Raúl Plaza – Bajo
Sergio Culebras -  Guitarra

 

Nota: 8/10

Review realizada por Juan Fernández