A primeros de septiembre tenía lugar una nueva edición del Rockvera Fest. Nuevamente acudíamos a la cita en el teatro L'Llar, con un más que apetecible cartel compuesto por Hamlet, Sound of Silence, Easy Rider, Los Gatos de ChernobylTribute Against the Machine.

¿Queréis saber cómo fue el festival? ¡No os perdáis esta crónica!


El verano de 2023 se ha convertido en una surrealista competición entre festivales musicales. Una suerte de Grand Prix del Verano, en el que no disfrutan ni el abuelo ni el niño, y en el que reinan los recintos precarios, los baños insalubres, los grupos tocando a horarios obscenos y sobre todo, la cerveza cara. Si es que a algunas marcas que patrocinan dichos eventos se les puede considerar cerveza…

Mas por fortuna para todos los amantes de la música, siguen existiendo pequeños oasis que a modo de irreductible aldea gala, apuestan y consolidan un formato más amable con el público, los músicos y el entorno. Uno de esos muchos reductos, es el Rockvera Fest.

El festival decano del rock/metal asturiano regresaba un año más al Teatro L’Llar de Les Vegues de Corvera, con un cartel musical muy apetecible, un servicio de barra de calidad (2,5€ la caña)  y un precio imbatible en la entrada: cero euros.

El festival se iniciaba de la misma forma que el año pasado. Tribute Against the Machine sería el grupo encargado de amenizar la sesión vermut. Todo apuntaba a una repetición del excelente ambiente de 2022, pero la amenaza de lluvia hizo que la organización agudizase el ingenio y el vermut se celebrase en el interior del teatro.
Las caras del público eran un poema al entrar al recinto, entre ilusión e incredulidad el respetable se encontraba a los cuatro músicos tocando en un círculo en mitad del teatro. Un par de temas bastaron para que el personal reaccionara y mientras el grupo disfrutaba de lo lindo, el público se soltaba y se enganchaba a la fuerza de los temas de la mítica banda californiana.
Un ambiente tremendo, en el que niños disfrutaron como adultos y adultos como niños. De los mejores momentos musicales del 2023.

El grueso del Rockvera arrancaría horas más tarde, con unos para mí desconocidos Los Gatos de Chernobyl, quienes se convirtieron en todo un descubrimiento. Juventud al servicio de la energía en directo, con un rock&roll directo y atrevido, rozando el punk por momentos y repleto de influencias de otros estilos. Su show tuvo todo lo que tiene que tener un concierto: buen sonido, conexión con el público, algún temazo y un (numeroso) público entregado a la causa.

La banda se encuentra ahora grabando su segundo disco, con lo cual es el momento ideal para darle al play a su debut de 2021 "Enfermo" y no descubrir demasiado tarde a una formación llamada a ser la revelación de la escena asturiana.

A continuación llegaba el turno de una banda mítica de la escena heavy metal, Easy Rider. Y salvo los problemas de Dess con el micro y los acoples, lo suyo fue un concierto inapelable. Un buen sonido, obviando lo ya comentado, acompañó a una base rítmica sólida compuesta por José A. Villanueva y un enérgico José Roldán, una dupla de guitarras (Javier y Dani) que destila heavy metal por las doce cuerdas y una vocalista técnicamente inapelable.
Su repertorio se basó en los clásicos de la banda, aunque hubo tiempo para disfrutar de "Maniphesto", adelanto de su nuevo disco y que supone un paso adelante para la formación frente al sonido habitual del grupo.
Como digo, buen concierto, aunque personalmente cada vez me cuesta más trabajo conectar con los grupos de heavy metal clásico. Quizás sea apreciación personal, quizás que el género necesita afrontar nuevos riesgos… sea lo que sea, es un debate para otra ocasión.

La conexión fue por contra totalmente instantánea con Sound of Silence. Quizás porque o conectabas, o corrías el riesgo de ser atropellado por la batería de Jorge. Lo de Sound of Silence fue un ejemplo claro de "veni, vidi, vinci" y convirtió su concierto presentando "Primvs Capite" en un rodillo sonoro que amenazó los cimientos del teatro, mientras el público se debatía en una mezcla de wall of death, incredulidad, calor y headbanging.

El caso de la banda asturiana es digno de estudio, les conozco desde hace una eternidad y cada vez suenan más potentes, cada vez parecen tener más energía y Nefta parece ser mejor frontman. Como Brad Pitt pero sin operaciones, todo a base de talento y trabajo.

Un caso similar ocurre con Hamlet. Estandartes de la escena metalera patria, Paco, Molly, Ken, Álvaro y Luis siguen sin levantar el pie del acelerador y con treinta años de trayectoria a sus espaldas no parece que vayan a hacerlo en el futuro próximo. Me llamó mucho la atención la disposición de su escenario, solo un pedestal en el centro y apenas tres cabezales para guitarras y bajo, todo era amplitud y Paco centraba el foco visual mientras el resto del grupo no paraba de moverse.
Su concierto fue una clase maestra, basando su repertorio en los temas de "Revolución 12.111", "El Infierno" e "Insomnio" no había posibilidad al fallo y nada más comenzar L’Lar (abarrotado a estas alturas de la noche) ya era un desfile de himnos del metal, para disfrute del respetable.
Mientras "Berlín" ya pide un sustituto, la curiosidad aumenta en torno al repertorio de la próxima gira de la banda. ¿Seguirán añadiendo discos clásicos? ¿O se atreverán con un cambio radical con "Syberia" y "Pura Vida"? Sea como sea, siempre será un placer disfrutar de Hamlet en Corvera, Avilés o donde sea de Asturies.

Un éxito rotundo. Eso es lo que fue el Rockvera 2023, con público llegado de todas partes de Asturias, León, Cantabria o incluso Sevilla y disfrutando en Corvera de una pasión común: la música.

¿Se puede pedir algo más?

Sí, que para 2024 terminen las obras de la "Y", por favor.

 

Crónica y fotos: FelipeSM